Sólo el silencio

Aunque la realidad del ser ha sido establecida de muchas maneras,decirlo no es suficiente: el ser sólo es conocido por experiencia propia.

Sri Bhagavan Ramana Maharshi

ॐ नमः शिवाय

jueves, 30 de abril de 2015

SAT DARSHANAM - Versos 32-33-34 (No es uno ni muchos)

Cuarenta versos sobre la Realidad
(vivir desde el corazón)

32- Las estructuras afirman “Eso eres tú”, sin inquirirse y llegar hasta el Ser que siempre brilla, residiendo como Eso. 
Discutir de nuevo, interminablemente, sólo se debe a la debilidad de la mente.

33- Afirmaciones como “ no me conozco” o “ me conozco”, son motivo de risa ...
¿Acaso hay dos seres, el que ve y lo visto? 
La experiencia de todos es que el Ser es Uno.

34- En vez de residir firmemente en el Corazón en nuestro propio y verdadero estado, disputar acerca de “real o irreal”, con forma o sin forma, “ muchos o uno”, es estar cegados por la ilusión.





Siguiendo la senda del Jñana Yoga, debemos abocarnos a investigar la naturaleza de ese compuesto al que llamamos "mente", insistiendo sobre la cuestión hasta que quede completamente esclarecida.

Hemos constatado en las diversas etapas (yogas) transitadas que en ausencia del pensamiento en particular, y de las actividades de la mente en general, se vislumbra una conciencia residual, apacible y silenciosa, que lejos de atemorizarnos como al comienzo, nos atrae hacia Ella cada vez más, pues la sensación ya no es de "vacío" sino de plenitud, de pura y absoluta certeza.

Ese fantasma creado por las circunstancias y asumido por nosoros mismos como propio, ya no parece tan poderoso ni temerario... Ahora vemos que la "mente" es sólo el aspecto funcional de la Consciencia única, y si bien se expresa de un modo particular en cada objeto, no tiene en sí misma (en su naturaleza esencial) ninguna característica de entidad independiente o autónoma.

El Maharshi enseña a los aspirantes avanzados que en rigor de verdad no existe algo como la mente, y que la entidad denominada "manas" en las escrituras es formada en relación a la esencia del alimento consumido... Luego se expresa como amor, odio, deseo, etc., pero se trata en realidad de un compuesto nacido del intelecto interactuando con el ego, el pensamiento "yo", que recrea la atmósfera de un ser separado y autónomo, reclamando el protagonismo de las acciones que acontecen dentro y fuera del cuerpo.


La mente es sólo un montón de pensamientos. 
Los pensamientos tienen su raíz en el pensamiento "yo"... 
Todo esto consiste sólo en conceptos mentales. 
Ahora usted está identificado con un "yo" equivocado, 
que es el pensamiento "yo". 

Éste surge y se hunde, 
mientras que el significado verdadero del "Yo" está más allá de ambos. 
En su ser no puede existir una separación. 

Cuando estaba profundamente dormido no había infelicidad. 
Mientras que la infelicidad existe ahora.
¿Qué ocurrió ahora para que experimente esta diferencia? 

Mientras usted estaba dormido no existía el pensamiento del "yo", 
mientras que ahora está presente. 

El verdadero "Yo" no aparece, y el "yo" falso está desfilando. 
Este "yo" falso es el obstáculo 
para su conocimiento correcto. 

Averigüe de dónde surge este "yo" falso. 
Entonces desaparecerá. 
Usted será solamente lo que usted es, 
o sea, Ser absoluto.

La mente es un mito... Al representar funciones tan diversas se utiliza el nombre genérico de "mente" para resaltar su naturaleza esencial, y si bien con el agregado en Buddhi (intelecto) parece contar con su propia sensibilidad, la mente es "jada" o insensible y su aparente poder de cognitividad refleja tan sólo su asociación con la conciencia-base.

Nuestro amado Guía también suele utilizar la comparación con el lapso de sueño profundo, pues allí la mente se halla en estado latente, inactiva, y el pensamiento "yo" no surge para ir tras ningún objeto.

Si bien el sueño sin sueños no es idéntico al estado final, la "sensación" encaja a la perfección ya que si tan sólo pudiéramos permanecer en el estado de dicha y desapego que experimentamos en el sueño profundo durante el estado de vigilia, esto sería equivalente a la realización.

Con esto tiene que quedar bien aclarado que el único esfuerzo que podemos llegar a necesitar a partir de aquí, es aquél que se dirige hacia la extinción del pensamiento "yo", y nunca hacia la obtención del "Yo" verdadero, que es eterno y omnipresente por naturaleza.

Todo lo que puede ser obtenido, es suceptible de perderse tarde o temprano... Todo agregado o logro artificial es contrario a nuestra real naturaleza, que está siempre aquí y ahora, inmutable, sin cambio y por lo tanto no requiere esfuerzo alguno de nuestra parte.

Develando el origen del "yo" se encuentran todas las respuestas, o mejor aún, se agotan todas las preguntas, las dudas y los deseos del aparente ser individual...



33- Afirmaciones como “ no me conozco” o “ me conozco”, son motivo de risa ...
¿Acaso hay dos seres, el que ve y lo visto? 
La experiencia de todos es que el Ser es Uno.

La totalidad de la que partimos no puede expresarse de otra forma que a través de la UNIDAD...

Pero esa unidad de consciencia y de propósito no puede realizarse como Aquello que le dio origen, hasta desaparecer por completo ... hasta trascender cualquier estadio de creatividad, cualquier construcción artificial.

Creamos y proyectamos mentalmente en todo lo que vivimos, en cada experiencia acumulada en el corazón de nuestro devenir... pero no podemos crear lo que YA EXISTE, lo que realmente ES LO REAL...

Sentimos ser lo que creemos ver... ¡Vemos la realidad como la vivimos!

La identificación con la forma, física o mental, es la causa del olvido, del sufrimiento y el comienzo de la búsqueda equivocada, de aquello que siempre está presente y patente como la única existencia.

Invertir nuestro tiempo, investigación y meditación, en descubrir en qué se basa esa creencia, creadora de la falsa noción de identidad, produce indefectiblemente un VISLUMBRE de la Verdadera esencia, del trasfondo existencial que es la base de todo.  

Abocarse con seriedad, insistiendo hasta que toda duda desaparezca... Sostener esta investigación, concentrando toda nuestra energía en "ese solo punto"... es la correcta actitud de Atma Vichara, la indagación del Ser.



34- En vez de residir firmemente en el Corazón en nuestro propio y verdadero estado, disputar acerca de “real o irreal”, con forma o sin forma, “ muchos o uno”, es estar cegados por la ilusión.

Para conocer los objetos precisamos del pensamiento, más para conocernos a nosotros mismos; ¿necesitamos algún instrumento o una forma simbólica que nos represente?

Lo inmutable e imperecedero tiene que ser por ende omnipresente, esto es, estar siempre expresado totalmente en el aquí y ahora.

La luz siempre es distinta de lo iluminado... Sin embargo la mente acumula tendencias (vásanas) que la incitan a identificarse con los objetos iluminados y proyectados como tales desde la oscuridad de la memoria personal.

El verdadero conocimiento no es el contenido de los pensamientos, ni de los sentimientos, ni de ninguna otra modificación de la sustancia mental, sino el trasfondo en el que surgen, el Contenedor absoluto, Aquello que ilumina el continente todo con su sola presencia... RESPLANDECIENTE!

Este conocimiento no puede pensarse, objetivarse, ni tomar forma alguna en nuestra mente... La consciencia YO SOY es en sí misma ese resplandor... Por eso decimos que no podemos conocerLo, pero podemos SERLO... ¡Experimentarlo, transitarlo, comenzar a vivir como lo que somos en realidad, como ese espacio de consciencia silenciosa que pulsa y brilla en nuestro corazón!



"Yo Soy" es Dios, no es pensar "Yo soy Dios".
Realice el "Yo Soy" y no piense "Yo Soy".
"Sabe que Yo soy Dios", se dice,
no se dice, "Piensa que Yo soy Dios"...

Se dice "YO SOY el que SOY". 
Esto significa que una persona debe permanecer como el "Yo". 
Ella es siempre solamente el "Yo". 
No es nada más. 
Sin embargo, la persona pregunta: ¿quién soy yo?...
Una víctima de la ilusión preguntaría: ¿quién soy yo?, 
no un hombre plenamente consciente de sí mismo.

La errónea identidad del Yo con el no-yo 
hace que usted pregunte: 
¿Quién soy yo?

Sri Ramana Maharshi

¡Yo soy plena consciencia de mí mismo sin ningún agregado, por ende, lo natural en mí es lo permanente y lo que atestigua todo lo accesorio o transitorio!

Permanecer en la consciencia sin objeto, en el origen virginal de todos los pensamientos, persistiendo ante cualquier estado u objeto que aparezca superpuesto sobre ese trasfondo de absoluta pureza, es la única práctica requerida en el luminoso sendero del Jñana Yoga.

Este permanecer como el Ser, no implica identificarnos, fijar o seguir aquello que surja en la consciencia, sino por el contrario, ser simplemente lo que somos siempre, sin nombre ni forma, sin calificación alguna, sólo consciencia pura, consciencia sin más, sin calificar ni inventariar nada de lo que presenciamos ya que conocemos por propia experiencia la verdadera entidad de toda apariencia.

Se le pide al Jñani por última vez (y para siempre), que intente permanecer como el continente, sin relevancia del contenido que se capte o se conozca a través de los órganos de los sentidos y la conciencia, más allá de todos los cambios en la superficie.

Presenciando como espectador desapegado esta tan extraña aparición, conscientes de que no es lo último, ni lo esencial, sino que tiene que existir una base firme o inmutable para que ella se manifieste.

Esa conciencia que experimenta las acciones del cuerpo como movimientos propios es hija de la sensación YO SOY, que a su vez es un reflejo transitorio y por tanto, debe surgir de una base firme, permanente, eterna... El Yo real.

La biblia dice: Estad quietos y conoced que Yo soy Dios.

Al despertar por la mañana lo primero es YO SOY como sensación, en seguida ese sentimiento toma forma y busca una imgagen o represetanción dimensional... El intelecto responde con el objeto "cuerpo"... Así este "yo", apócope de yo-soy-el-cuerpo se constituye en el primer pensamiento y la raíz o sujeto referente de todos los demás que surjan.

La poderosa Luz del Ser pasa en pocos segundos a ser obstruída por una sombra conceptual que se interpone y la sofoca, trastocándola...

¿Qué sucede aquí para que perdamos de un momento a otro la referencia existencial que corresponde a nuestro estado natural?

La Enseñanza del Sadgurú se basa fundamentalmente en que investigando este fenómeno de transposición, sigamos ese circuíto energético hasta su origen, llegando así al punto o al nivel de mayor desapego que seamos capaces de soportar.

Esta indagación sagrada no tiene principio ni fin... porque si bien decidimos hacerla consciente en un determinado punto de nuestra transición, ella ya estaba ahí... de antemano... preexistía desde el origen mismo de la creación, en cada partícula de energía cósmica, en cada átomo del universo...

Y tampoco tiene fin, porque no termina hasta que esa Consciencia de Brahman (totalidad) se halle establecida, trascendiendo aún la maravillosa estancia en la Unidad o Samadhi... que tampoco es el final!

Entonces sencillamente... al desaparecer el efecto engañoso (la identificación con lo percibido), la causa (la perspectiva mental o sensoria) también se diluye ... y conocemos el Samadhi con objeto, sin objeto y el natural, Sahaja Samadhi, desde donde nos habla el Sadgurú...


Esa consciencia pura ya está ahi, pero tiene que develarse íntegramente en esta existencia temporal, hasta establecerse de manera definitiva... todos los sabios pasaron por esa etapa, a pesar de su iluminación temprana, y teniendo la fortaleza necesaria en su espíritu (producto de esa visión anticipada) como para permanecer allí.. en ese estado REGENERADO, en ese origen esencial... sin agregados!

Una vez madurado el fruto (TRYAMBAKAM) del estado natural... la semilla universal... lo que está más allá de las palabras!

No hay otro lenguaje que el SILENCIO para transmitir esta experiencia... o dejarse llevar por la mirada del Gurú... hasta ese estado indescriptible de Amor Universal!

No hay UNO ni MUCHOS... Ni unidad, ni totalidad... todos son conceptos!

¡Somos eso mismo que no acepta otra definición ni conceptual, ni vivencial... que LO QUE ES!

¡SÓLO LO QUE ES, SOY... Y LO QUE SOY, SIMPLEMENTE ES!

¡OM NAMAH SHIVAYA!



Âtma Vichara paso a paso

Persigue inexorablemente la búsqueda del "Quién soy yo".
Analiza tu personalidad entera.
Trata de encontrar dónde comienza el pensamiento del Yo.
Prosigue con tus meditaciones.
Continúa volviendo la atención hacia adentro. (Un día la rueda del pensamiento perderá velocidad, y una intuición surgirá misteriosamente)
Sigue esa intuición, deja que tu pensamiento se detenga, y te conducirá finalmente hacia la meta.

De las Enseñanzas de Sri Ramana Maharshi